¿Qué es gasogeno?

El gasógeno es un dispositivo mecánico que se utiliza para convertir combustibles sólidos, como el carbón, en gas de síntesis. Fue ampliamente utilizado durante la Primera y Segunda Guerra Mundial y se consideró una alternativa al uso de combustibles líquidos como la gasolina.

El proceso de gasificación en un gasógeno implica la combustión incompleta del combustible sólido a temperaturas elevadas en ausencia de oxígeno o con una cantidad limitada de oxígeno. Esto produce una mezcla de gases conocida como gas de síntesis, que consiste principalmente en monóxido de carbono (CO), hidrógeno (H2), nitrógeno (N2) y pequeñas cantidades de metano (CH4) y dióxido de carbono (CO2). El gas de síntesis se puede utilizar como combustible para motores de combustión interna o para producir otros productos químicos.

El gasógeno consta de un reactor en forma de tambor o recipiente donde se coloca el combustible sólido. Al calentarse, el combustible se descompone en gas de síntesis y residuos sólidos, conocidos como coque. El gas de síntesis es capturado y luego se puede filtrar y limpiar antes de su uso. El coque se puede usar como combustible adicional o como material para otras aplicaciones.

El gasógeno tiene varias ventajas y desventajas. Por un lado, utiliza combustibles sólidos, lo que lo hace más económico y accesible en comparación con los combustibles líquidos. Además, puede utilizar una variedad de combustibles sólidos, como carbón, leña o incluso residuos agrícolas, lo que lo convierte en una opción versátil. Sin embargo, el proceso de gasificación requiere un control preciso de la temperatura y la cantidad de oxígeno, lo que puede ser complicado y costoso de implementar.

A pesar de las ventajas y desventajas, el uso del gasógeno ha disminuido significativamente en las últimas décadas. La disponibilidad de combustibles líquidos más convenientes, como la gasolina y el diesel, así como el desarrollo de tecnologías más eficientes y limpias, han llevado a su desuso en muchos lugares. Sin embargo, algunos países todavía lo utilizan como una alternativa energética en áreas rurales o como respaldo en caso de escasez de combustibles líquidos.