¿Qué es serpentino?

El serpentino es una roca metamórfica compuesta principalmente de minerales de silicato de magnesio. Es comúnmente de color verde oscuro a verde claro y puede tener un aspecto moteado debido a la presencia de minerales adicionales.

El serpentino se forma a partir de rocas ígneas ricas en magnesio como el peridotito y la olivina, a través del proceso de metamorfismo. Durante este proceso, la olivina se convierte en minerales de serpentina, como la crisotila, lizardita y antigorita. Estos minerales son conocidos por su textura fibrosa, lo que hace que el serpentino sea frecuentemente utilizado en la fabricación de asbesto o fibra de amianto.

El serpentino se encuentra en muchas partes del mundo, incluyendo regiones de Europa, África, América del Norte y del Sur, y Asia. Se utiliza ampliamente en la industria de la construcción como una piedra ornamental debido a su aspecto atractivo y durabilidad. También se ha utilizado a lo largo de la historia para la talla de esculturas y objetos decorativos.

Además de su uso en la construcción y el arte, el serpentino tiene propiedades terapéuticas y es utilizado en la medicina tradicional. Se cree que tiene propiedades curativas y puede ayudar a aliviar el estrés, mejorar la circulación sanguínea y fortalecer el sistema inmunológico.

No obstante, es importante tener en cuenta que algunas variedades de serpentino pueden contener amianto y son consideradas peligrosas para la salud humana. Por lo tanto, es fundamental tomar las precauciones necesarias al trabajar con esta roca y evitar la exposición al amianto.