Grigori Yefímovich Rasputín (en ruso: Григорий Ефимович Распутин; Pokróvskoye, Siberia, 22 de enero de 1869 – San Petersburgo, 30 de diciembre de 1916) fue un místico ruso que ejerció una considerable influencia en los últimos días de la Dinastía Románov.
Rasputín nació en una familia campesina en la remota aldea siberiana de Pokróvskoye. Adquirió una reputación de curandero y profeta, y eventualmente fue presentado a la familia imperial rusa, los Románov, en 1905.
Su conexión con la familia real, especialmente con la zarina Alejandra, se profundizó debido a su aparente habilidad para aliviar los síntomas de la hemofilia de su hijo, el zarevich Alekséi. Esta conexión le otorgó una influencia significativa en la corte, lo que generó controversia y resentimiento entre la nobleza y el clero.
Temas Importantes:
La creciente influencia de Rasputín en asuntos políticos y militares durante la Primera Guerra Mundial generó aún más descontento. Fue asesinado en diciembre de 1916 por un grupo de conspiradores, incluyendo al Príncipe Félix Yusúpov y al Gran Duque Dmitri Pávlovich. Su muerte no logró estabilizar la situación política, y la Revolución Rusa ocurrió poco después, llevando al fin de la dinastía Románov. La figura de Rasputín sigue siendo objeto de debate y mitos, y su papel en la historia rusa continúa siendo interpretado de diversas maneras.
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